jueves, 28 de junio de 2012

Palabra vocabulum: amistad


"La amistad es un alma que habita en dos cuerpos; un corazón que habita en dos almas" 
Aristóteles 

Amigos, los que se cuentan en una mano y los dedos sobran, los cientos que tengo en Facebook, con los que hablo todos los días, con los que salgo de rumba, a comer, los que me escuchan, los que me hablan… ¿Cuáles son los amigos? 

Observando las relaciones de amistad que tengo y las que me rodean, me inquieté por saber que es realmente la amistad, pues lo que veo como amistad no es lo que creo que es y ni punto de comparación con el tipo de relación que tengo con mis contados amigos, que a pesar de mi carácter extrovertido son pocos y que escribiendo sobre este tema lo confirmo con orgullo, pues según Aristóteles tener pocos amigos es síntoma de honestidad. 

La palabra amistad viene del latín amicitas, derivado de amicus o amigo que tiene que ver con la palabra amar. Para la RAE, la amistad es un afecto personal, puro y desinteresado, compartido con otra persona, que nace y se fortalece en el trato, allí hay afinidad y conexión, y la palabra amigo está definida como aquel que profesa fina amistad a otra persona sin exceder los límites de lo justo y lo honesto

Cuando empezaba a estudiar comunicación social, me decían que el hombre no solo es social por naturaleza sino por necesidad, Aristoteles dice en “la ética de Nicómaco”, en el capítulo 8, que habla sobre la relación de la amistad con la ética, que el hombre no solo es social sino que necesita de amigos para alcanzar la felicidad completa. Así la amistad se constituye como un fenómeno universal y necesario para todo ser humano. 

En mi lucha por defender el significado de una verdadera amistad, reflexiono sobre la facultad que tenemos de escoger a nuestros amigos, que es algo que muchas veces siento confuso cuando circundan actos “amistosos” con ínfulas de deber, y no de querer. Así que partamos del hecho de que los escogemos, independientemente del motivo que nos lleve a hacerlo. 

En el libro de Aristóteles que mencioné anteriormente, documento en el que me basé para acercarme a la verdad de la amistad, se define el principio de amistad en un benevolencia reciproca, en el sentido de amar a alguien porque es bueno en si mismo. Que la utilidad y placer de compartir con tal, haga parte de la relación, no quiere decir que estos la constituyan. 

El ilustrado clasifica a partir de la igualdad y la reciprocidad los diferentes tipos de amistad en tres: Amistad por interés y por utilidad, que son aquellas que se dan por accidente y se basan en el egoísmo, y la amistad por virtud que es aquella que voluntariamente se origina por querer admirar y compartir el valor de lo que es el otro. 

“La verdadera amistad, de la cual los otros dos tipos participan analógicamente, es la amistad honesta, que busca al otro por lo que el otro es y no porque sea bueno para mí o porque me dé algún placer. Esta amistad es un estado superior a una actividad o a una emoción, pues perdura en el tiempo entre dos personas con la elección racional de ambas” Aristoteles, Ética de Nicómaco 

Aristóteles afirma que en las verdaderas amistades (por virtud), no se encuentran quejas ni sospechas, pues esto ocurre cuando estas están cimentadas en el placer de lo que el otro puede ofrecerme. Me asombré al encontrar la relación de todo esto con la ética, y fue cuando leí que el fundamento de la amistad verdadera es el amor a sí mismo y la honestidad: 

“Cada hombre bueno es amigo de sí porque disfruta de su pasado y de su futuro, mientras que el malvado está en guerra constante dentro de sí, y entonces la amistad es difícil. Si alguien se ama a sí mismo, sabrá amar a los demás, y por eso puede comenzar una amistad… Este amor a sí mismo tiene que ser verdadero. El falso amor de sí se llama egoísmo… las amistades por interés y por utilidad reflejan un amor por si mismo falso, el egoísmo” Aristoteles, Ética de Nicómaco 

De allí que el amor a si mismos es el que nos permite gozar de una verdadera amistad, sabiendo que el otro tiene errores como yo, pero igual que a mi mismo lo quiero por lo que es, en cambio el egoísta no soporta la amistad sino hasta cuando esta le genera beneficios. 

“Los amigos virtuosos son necesarios para la felicidad, pues el hombre es un "animal social", necesitado de otros seres humanos de quienes depende y con quienes puede compartir. Los amigos son el bien externo más grande para el hombre.” Emcion Pérez Gómez 2010 




Relacionando  lo que resalté en la cita anterior, que me sorprende porque lo había leído en la Biblia, quiero mostrar como allí describen la amistad:

“Un amigo fiel, es una protección segura, el que lo encuentra ha encontrado un tesoro” (Eclesiástico 6:14)

Esto me pone a pensar en como desde hace años, se ha visto a los amigos como algo escaso y con mucho valor como para relacionarlo con un tesoro, y hablando de tesoros, recuerdo otro versículo que dice:

“No os hagáis tesoros en la tierra, dónde la polilla y el orín lo corrompen y donde ladrones minan y hurtan, sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla, ni el orin corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde estén vuestros tesoros, allí estará tu corazón” (Mateo 6:19-21) 

La amistad es uno de esos tesoros del cielo, en donde está puesto todo el corazón y si realmente me quieren por lo que soy, ¿quien me la puede robar? 

La amistad no tiene límites cuando se fundamenta en valorar lo que el otro es, no tiene fin ni modificaciones si se conoce a alguien completamente, en cambio los bienes, utilidades e intereses que dependan de una relación, pueden ser variables de acuerdo a la circunstancia en la que se encuentre una vida. Complemento con algo que alguna vez me dijo un amigo, la amistad se basa en la sinceridad. 

Para aquellos/as con los que vivo la amistad. 

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