domingo, 15 de abril de 2012

Palabra Vocabulum: vocación

“Dadme una tarea en la que pueda poner algo de mí mismo y ya no será una tarea; será gozo; es arte.” Bliss Carman

En este mes estuve pensando en la relación de las cosas que nos gustan, que nos apasionan, que nos motivan como seres humanos y la manera en que las encausamos en nuestros quehaceres de acuerdo a lo que el mundo nos ofrece. De esta manera encontré  la Palabra Vocabulum : vocación,  definida por Aristoteles  como el punto en el que se cruzan los dones de alguien y las necesidades del mundo.

Etimológicamente, la palabra  vocación proviene del latín vocatio, del verbo llamar, ha sido traducida como: convocación o llamado. Creo que en la naturaleza humana de encontrar un destino, en algún momento  nos hemos preguntado ¿cuál es nuestro llamado o  para que vinimos? o mejor, de acuerdo al portafolio de posibilidades que ofrece la vida para desarrollarme como ser humano, ¿en dónde quepo de acuerdo a lo que soy o a lo que sé hacer?

“La vocación es un proceso que se desarrolla a lo largo de la vida, y que se va construyendo basada en el descubrimiento de quién soy, cómo soy y hacia dónde voy.” María de los Ángeles Gavilán

Pienso que las crisis que tenemos en nuestra vida, momentos derivados del existencialismo, en los que nos sentimos sin norte, desubicados y hasta frustrados; son los que nos ayudan irónicamente a acercarnos a nuestra vocación personal, porque en esos momentos  podemos darnos cuenta  hacia dónde no queremos ir  y se esclarece el panorama para saber hacia dónde sí.

La RAE define la vocación como la inclinación a cualquier estado, profesión o carrera, personalmente, prefiero irme por la definición de Aristoteles, porque está más enfocada a la satisfacción que genera encontrar un complemento entre lo que nos gusta hacer y lo que la tierra necesita, casi una relación oferta-demanda que apunta al desarrollo y realización personal (profesional, sentimental, laboral, etc).

Cuando terminaba de estudiar en el colegio, y se acerba el momento de elegir por que camino profesional irme, cuando ya no debía seguir un pensum generalizado sino que tenía la posibilidad de escoger que carrera estudiar, vinieron muchas preguntas a mi cabeza, aunque desde primaria sabía que quería hacer. En el contexto de este momento se encontraba el hecho de imaginarme la sonrisa de mi papá sí decidía estudiar medicina, mis pasiones múltiples por el arte  y las ganas de volar (aviación).

Por momentos se me pasaba por la cabeza que sí estudiaba medicina tendría mucho dinero y además mis padres se sentirían muy orgullosos de mi, en cuanto a la aviación pensaba que solo me gustaba el hecho de volar y que tal vez lo que quería no era dedicarme específicamente a eso (lo asumí más como hobbie) y en cuanto al tema de estudiar Comunicación Social, me dije que si era lo que me gustaba y sí era una real motivación, sería excelente en eso y por lo tanto de alguna forma me daría dividendos y más allá de eso, disfrutaría del placer de hacer lo que me gusta.

Me decidí por la última opción que nombré, y ahora que busco sobre este tema de la vocación me encuentro con esta pregunta que le hacen a una psicóloga experta en orientación vocacional: “¿Qué le puedes asegurar a la persona que elige este camino del desarrollo personal antes que los intereses externos? – Responde María de los Angeles Gavilan - autenticidad, algo que debe acompañar cada decisión que tome en su vida; es un comienzo de aprendizaje para decidir en cada momento. Y si lo hace con pasión, habrá siempre una mayor probabilidad de seguridad laboral, y el dinero será consecuencia. Y, cuando se elige auténticamente, te puedo asegurar que cualquier obstáculo, tanto en lo laboral como en el resto de la vida, será superado con mayor facilidad.”

Creo que hay que tener mucha precaución en  los momentos de conformismo en los que por el hecho de sentarnos en la comodidad, nos autoengañamos durante mucho tiempo desviándonos de nuestra vocación personal, para mí,  es peligrosísimo estar haciendo algo que no nos parece mal, que está bien, porque nos quedamos ahí sin buscar lo mejor. Le tengo más miedo a acostumbrarme a algo que me genera cierta satisfacción a algo que tenga muy claro que no es para mí. Se viene a mi mente un dicho que dice que lo bueno es el peor enemigo de lo excelente, pasa el tiempo y ahí nos quedamos.

“Dichoso el que tiene una profesión que coincide con su afición.” George Bernard Shaw

La vocación, en términos de desarrollo personal, requiere de una proyección a mediano y largo plazo, ejercicio que se complica al enfrentarnos a la imposición de una cultura netamente audiovisual e inmediata. Todo lo que nos venden ya es instantáneo, creemos que todo es igual y al replicar la misma creencia en nuestros proyectos de vida, vemos todo fuera de nuestro alcance, por lo tanto nos quedamos en algún punto del camino que nos lleva a encontrar nuestra vocación, que aunque a veces la conocemos, la dejamos ir.

Escoge un trabajo que te guste, y nunca tendrás que trabajar ni un sólo día de tu vida.  Confucio

Esta última cita de Confucio, me llama la atención porque la primera vez que nombra trabajo se refiere a lo que elegimos  hacer y la segunda a sacrificio, que es muy diferente a esfuerzo. Quiero ejemplificar lo de Confucio con algo que analizaba en mi mismo cuando tenía clase de música a las 6:45am, yo en la ruta ya iba ensayando cosas, pensando en proyectos para proponer, tenía cero sueño y claramente me esforzaba por levantarme temprano que siempre ha sido algo difícil para mi, pero estaba feliz, no importaba; a diferencia de la clase de física, eso si era un sacrificio, llegaba tarde, con cero actitud, etc.

También me acuerdo cuando madrugaba a las 3:00 am para recoger a un grupo de teatro con el que generábamos conciencia en el personal de una mina de carbón en La Guajira, para que cuidaran sus vidas mientras trabajaban. Sí requería de esfuerzo, llegaba muy cansado a mi casa, dormía dos y tres horas en ocasiones, pero la satisfacción de hacer lo que me gusta no tiene precio. De esa manera ilustro lo que para mi es la diferencia entre sacrificio y esfuerzo, entre hacer lo que se me presenta y buscar mi vocación, entre hacer  lo que me parece bueno y hacer lo que me alimenta.

Con el perdón de Confucio: Escoge un oficio que te guste, y nunca tendrás que trabajar ni un sólo día de tu vida.