domingo, 12 de febrero de 2012

Palabra vocabulum: perfección

Esta palabra, tratada de ser alcanzada por todos, me ha causado gran curiosidad después de ver una película que aborda su significado desde una perspectiva muy humana y muy divina al mismo tiempo. Black Swan.

Antes de entrar a tocar los puntos de la película en los que veo ciertas relaciones con las diferentes interpretaciones que le damos a la perfección, e inclusive con un símbolo de las filosofías orientales, como el Yin Yang, quiero hacer referencia a el imaginario colectivo de está y a la definición que se le ha dado.

La perfección muchas veces se entiende como aquello que  no tiene tacha, que no tiene nada por mejorar, sin errores, sin defectos. Creo que en gran parte de mi vida he estado preso en esa definición y por eso me parece importante ver  lo que dice la RAE sobre lo perfecto: “que tiene el mayor grado posible de bondad o excelencia en su línea”.

Esta definición me hace pensar en lo personal que puede llegar a convertirse la perfección, en el sentido de los puntos de comparación a los que podemos acudir para medir los niveles de bondad o excelencia y así decir que estamos en el mayor grado; pero dice: en su línea, lo que me lleva a deducir que esos patrones de medida son los de nosotros mismos, no de una manera arbitraria, sino a partir de los máximos niveles que hemos alcanzado, sacando la perfección de la competencia, en el sentido de medirnos con los otros, para volverla un ejercicio netamente individual.

Además esta definición habla del mayor grado posible, palabra que me aterriza inmediatamente en el plano de las facultades humanas.

Dejemos lo escrito a un lado para traerlo a colación cuando tengamos en la mesa los aspectos más importantes del discurso de la perfección que atraviesa “El cisne negro” de Darren Arnofzky. Sabemos que es la historia de una bailarina que quiere hacer parte de la última adaptación de “El lago de los cisnes” de Tchaivkosky, y que el requisito para hacer parte de esta obra perfecta  es que la misma bailarina pueda interpretar los dos cines, el blanco y el negro.


Vemos como ella obsesionada por lo que para ella es  perfección, solo puede representar el blanco porque es el papel de su vida,  veo acá lo blanco como todo aquello que esta bajo nuestro control, lo minucioso, lo fríamente calculado, etc. Lo interpreto como la perfección que persigue la ausencia del error. En la búsqueda personal de Nina (Natalie Portman en la película) por encontrar el cisne negro, hay un punto de partida que creo que es muy interesante, y es cuando el director de la obra le dice “touch yourself”, no entendiendo esto únicamente como una invitación a masturbarse, sino como el inicio de una búsqueda, que solo puede hacer ella misma por encontrar el cisne negro e interpretarlo en la obra, como si le hubieran dicho más allá de mastúrbate, trátate a ti misma, encuéntrate,  acá el cisne negro lo entiendo como los deseos, las pasiones,  lo que se nos sale de las manos y lo que no esperábamos pero que después de todo fue bueno también;  y es cuando después de un proceso fuerte con ella misma, incluso paranoico, donde todo el mundo debía aceptar su situación, menos ella (el bailarin que la dejo caer, las frustraciones transmitidas de su madre, la compañera de baile que “la perseguía”), entiende que como le decía su director,  la única persona que puede interponerse en su camino es ella misma.

El momento en el que como espectadores nos damos cuenta de que la que se enterró el vidrio fue ella misma, es el momento en el que pienso en cuantas veces nos hacemos daño inconscientemente a nosotros mismos pensando que son los demás los autores de nuestro sufrimiento. Inmediatamente después de haber hecho mejor su papel de cisne negro que el de cisne blanco (al contrario de lo esperado), la vemos morir en el acto final, dónde pronuncia sus últimas palabras: it was perfect.

¿Por qué dijo Nina que fue perfecto, sabiendo que estaba viviendo sus últimos minutos? , para mí Nina entendió la verdadera perfección, que es la que encierra las cosas buenas y las cosas malas, las que tenemos en nuestras manos, las que se nos salen de las manos, el cisne blanco y el cisne negro. Nina entendió la razón por la que su director le decía al comienzo que no le servía porque la veía muy perfecta (refiriéndose no a la perfección sino al perfeccionismo), muy medida, nada suelta.

Apenas se acaba esta película y con mil interrogantes en mi cabeza, me propongo verla ya no se cuantas veces,  porque encuentro una relación muy estrecha con el símbolo Yin Yang, que para mi, aborda exactamente el mismo discurso. Pues vemos que dentro de un círculo se encuentran distribuidos simétricamente el color blanco y el color negro, un poco de negro en el blanco y viceversa, un debate entre la unión y la división de los dos colores.


En muchos lugares encontré, como en este: http://www.elblogalternativo.com/2011/03/20/el-significado-arcano-de-los-simbolos-el-circulo-219/,  que el circulo ha sido durante años la representación de lo perfecto, y es precisamente lo que vemos en el Yin yang, un equilibrio de opuestos dentro de la perfección, que es el circulo. Al contrario de lo que creemos, el Yin Yang no es la representación del bien y el mal, sino del equilibrio. El blanco puede ser bueno, pero también puede ser un vacio, mucha oscuridad enceguece, y mucha luz también. Ese es el principio de este símbolo que pretende demostrar que la perfección está realmente en el equilibrio. Para la Nina del principio de la película, la representación de la perfección, teniendo en cuenta lo que tenemos del Yin Yang, sería algo así como un círculo pero todo blanco, sin nada de negro. Al final entendió que todo hacía parte de un equilibrio, aboliendo sus principios de perfección. Pienso que muchas veces confundimos la perfección con el perfeccionismo, y Nina quería ser perfeccionista, no perfecta, pero entendió que la perfección y su equilibrio le vendría mejor, me parece bueno si puede complementar esto que escribo, con un versus entre la excelencia y la perfección que propone una compañía de coaching para mujeres exitosas: http://www.portaldelcoaching.com/Actualidad/Columna/NL19-DOC1-Perfeccion-vs-Excelencia.htm.

Por lo tanto, en mi concepto de perfección el único que hay sin tacha es Dios, por lo demás no hay perfección como la ausencia de los errores, sino más bien como un proceso muy personal de aumentar nuestros niveles de bondad y excelencia de acuerdo a nuestros parámetros alcanzados, proceso donde esta presente el blanco y el negro en un gran circulo contenedor. Y aquí entendí  que Dios es soberano , y es porque todo hace parte de su perfección,  donde hay cosas buenas y malas, no porque sí, sino porque seguro en una armonía, aveces inexplicable, todo es para un bien. Además entendí, que la perfección humana, reconociéndola como el proceso personal que anteriormente mencionaba, es el sustento para ver que no hay lucha más interesante, que la que  tenemos contra nosotros mismos.

“Yo llamo perfección al acto en el cual, habiendo tomado todas las previsiones posibles, incluidas las leyes físicas, se llega a un resultado correcto. Se puede decir que el universo es perfecto, en cuanto incluye a la ley de incertidumbre, lo cual permite la variabilidad de los procesos.”
 ProfElioV

8 comentarios:

  1. Dany que super esta publicación, y estoy de acuerdo que la perfección es individual y bajo es esfuerzo de cada quien, pero mas que todo no es el esfuerzo sino el amor con el que uno pueda hacer las cosas, yo se que si hacen las cosas con mucho amor se podrían cambiar muchas maneras mediocres de hacer las cosas

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    1. Lindisimo lo que escribes Nico, si pienso que el amor es un diferencial determinante en lo que llamo yo aquí perfección, y más cuando se trata de un "auto- perfeccionamiento" hablaríamos de amor propio y por las cosas que hacemos.

      Gracias por leer.

      Abrazo fuerte!

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  2. interesante Dani pero a veces me pierdo hehehe tal vez porque tengo un estilo más simple.

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  3. Que buena reflexión, en especial la parte de lo "posible". Cada quien sabe cuál es el grado de su posibilidad y si está dando todo para alcanzarla o está dando menos que todo...
    ¡Felicitaciones!
    Marijo Hooft, Buenos Aires

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  4. Marijo, muy de acuerdo, el punto es darlo todo para estar en ese periodo constante de perfección. Muchas gracias por leer y saludos de Colombia para Llegar Alto!

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  5. Bueno DANIEL hasta el momento muy interesante la forma en que desglosas ciertos temas que circundan por nuestra mente y quizás para muchos tan solo sea palabras con algún significado y para otros pueden ser respuesta a ciertas situaciones o circunstancias en nuestra vida; pero que directamente son reflejadas en esas acciones que nos identifican como persona y cada vez pueden ser mas visible antes los demás. att: Adrián Sierra

    El tema de la perfección siempre ha estado rondando por mi mente; ya que el solo hecho de la palabra en si para mi ya guarda algo complejo, pero leyendo detalladamente cada linea y párrafo divise algo en donde expresabas que hay perfección y perfeccionismo lo cual me llamo un mas la atención y me permitió traer a coalición ciertos momentos en donde muchas veces pude ser perfeccionista y para otros mis hechos o mi hacer se enajenaba en la perfección, y no es absurdo pensar que por ser casi la misma palabra una corta y otra larga pensemos que tiene el mismo significado, ahora bien el querer hacer la cosas no bien sino con excelencia no debe estar ligado a querer ser perfecto, sino mas bien en el saber, hacer y saber hacer, porque es allí en donde como persona comprendemos que no nos limitados a un termino sino que somos capaces de construir y transforma espacios, situaciones,ideas en fin... es mas el hecho de escribir sobre 3, 6, 8 hojas y luego echarlas a la basura o borrar ideas no quiere decir que por eso queremos ser perfecto sino que en la medida o las posibilidades que se pueda mejorar algo del mismo modo se mejora nuestra manera de ver la vida y por ende los detalles que tiene y se tienen.

    y por ultimo es muy cierto cuando haces alusión a que nuestro enemigo es nuestro mismo ser, ahora bien se me viene a la mente el egocentrismo que también puede hacer parte del tema... pero ya esa es otra historia,

    nuevamente gracias por hacerte participe ya que estos espacios me agradan ¡¡¡ y quiero dejar DANIEL una frase: La clave de la perfección es el amor. Quien vive de amor, vive en Dios,por eso DIOS siendo perfecto ama a sus hijos en su imperfección

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  6. Danny, excelente: nunca había pensado en esa diferencia entre "perfección" y "perfeccionismo". Y probablemente para todas esas reinas de belleza, actores, actrices y funcionarios públicos que, con una inmodestia del tamaño de universo, dicen que su mayor defecto es el perfeccionismo, les cae como un baldado de agua fría: a la luz de lo que dices el perfeccionismo sí es en realidad un defecto, uno que no permite alcanzar la perfección. En conclusión todas esas reinas d belleza, esos actores y funcionarios resultan, en efecto, por cuenta de su defecto declarado, tan mediocres como todos los demás los vemos, y no como ellos se ven en sus particulares espejos de la vida.

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